sábado, 21 de mayo de 2011

EL PRIMER EMPLEO

Cada etapa que afrontamos es diferente y nos trae nuevos retos. La salida del colegio y el ingreso a la universidad, son pasos que sin pensarlo nos llevan a tomar decisiones que tendrán consecuencias y nos harán emprender un camino que forjará nuestro destino, tanto profesional como personal, y en ese camino se atraviesan personas que hacen que recorramos la vida con pasión y fuego en el corazón.

 El sueño que rodea nuestra cabeza al pensar en un primer empleo, es el espejismo de la estabilidad económica y que la ocupación sea referente a lo que estudiamos durante cinco largos años. Para cada carrera hay diferentes campos de acción y ofertas de trabajo. Hay algunas que para ubicarse es muy limitado y se debe recurrir a desplazarse a lugares específicos. Todos los días pensamos en lo maravilloso que fue estudiar Finanzas y Negocios Internacionales; es una carrera que amamos, respetamos y cada día vemos la utilidad que esta tiene y el complemento perfecto entre negocios internacionales, la globalización y las finanzas.

Termina el proceso de pregrado y se acerca la hora de enfrentar un jefe, compañeros de trabajo y lo mejor: realizar una labor que su éxito depende directamente de lo que hagamos y dejemos de hacer. A Levantarse temprano si no tienes carro, porque debes tomar un bus o ir a la tortura de Transmilenio... ¡¡¡esto realmente es fatal!!!.; luego, llegas al trabajo a desarrollar durante el día una labor concreta y si tienes la posibilidad y la fortuna de conseguirlo mientras estudias, salir rápidamente y evitar siempre llegar tarde e interrumpir la clase en la Universidad; así terminas tu día y luego para tu casa. ¡¡a descansar!!.

Cualquiera que vea esto diría:... y tu vida social?... muy poco, gracias, pero suficiente.

Pero en esto radica lo maravilloso de la vida, en tener retos cada día; en la felicidad de tener una ocupación y estabilidad. En darle tiempo a todo. Hay una frase muy cierta que reza…: “es mejor madrugar a laborar y no a conseguir labor”, aunque para llegar a esto nos toca pasar por empleos que definitivamente son traídos de los cabellos.


Hemos dividido los trabajos que en nuestra experiencia hemos visto, los que son y los que parecen. Los que son; se podrían catalogar como los que todos buscamos y pocos encontramos, catalogados como los que son muy firmes desde el primer momento, en cuanto a salario y ambiente en general. Los que parecen, la verdad no conocemos la razón del porqué, pero son los mejor pagos y a su vez muy agotadores.

Es difícil ubicarse, cierto, pero cuando se encuentra estabilidad ya no se quiere dejar la rutina; incluso llegamos a caer en la monotonía, pero solo necesitamos una oportunidad para alcanzar grandes resultados y, definitivamente de eso nos encargaremos nosotros; así que con la ayuda de todos nuestros seres queridos, no desmayaremos ante el primer resto que nos planea la vida profesional: ¡¡conseguir el primer empleo!!...



Por Diana Reyes y Maritza Franco, para Informator

viernes, 20 de mayo de 2011

GESTION DEL CAMBIO

Hola todos.

Dicen que la mejor manera de anticiparse al futuro es creándolo.


Sin duda, la supervivencia de las empresas depende de su capacidad de asimilar el cambio y esto depende exclusivamente de las personas y, en algo, de la capacidad de incorporar tecnología de punta.

A su turno, el contexto del liderazgo, como lo enseña James Collins, está determinado por la capacidad de motivar, enseñar y comunicarse con los colaboradores de la empresa, tal que se genere en ellos una sinergia motivacional que engrane y ponga a girar las tres esferas síquicas del ser humano, es esto “tocar personas” y esas esferas son: la afectiva, la volitiva y la cognitiva.

En la esfera afectiva se ubican las emociones; desde allí lloramos, amamos y sentimos esos estímulos que nos hacen humanos perfectamente impredecibles.  

La segunda es la esfera volitiva. Es aquella donde reside la voluntad humana que es una herramienta fundamental para remover obstáculos. En la voluntad reside la capacidad de reto, la persistencia y la resistencia al cambio.

La tercera esfera de este engranaje es la esfera cognitiva, que como sabemos es aquella donde reside el conocimiento teórico, conceptual o lingüístico (ver Rafael Echavarría “Ontología del Lenguaje”).


Para generar un comportamiento consecuente, racional y sistemático se deben engranar estas tres esferas, de modo que actúen como un sistema y creen una senda sináptica capaz de modificar la conducta y hasta la personalidad del individuo (“conductismo” de John Broadus Watson).

Esto no es otra cosa que un proceso para “tocar personas”, y comúnmente lo conocemos como “aprendizaje”, porque como me lo enseñó mi amigo Arturo Torregrosa, “aprender es generar acción efectiva” y, creo que tiene razón, porque cuando aprendes algo, eres capaz de transformar sueños en acciones concretas.

Por Guillojiménez Informator